El vuelo que nunca voló

Debería estar escribiendo esta entrada desde lejos. Quién sabe, podría ser Estambul o incluso un aeropuerto perdido de Costa de Marfil....pero no. No pudo ser. Y es por eso que estoy en el sofá de mi casa.

Me considero un chico en busca de aventuras y nuevas experiencias. Sin embargo, esta vez me pasé de la raya. Bueno, no fue mi culpa, pero me encontré en una aventura inesperada que casi me destroza la aventura semi esperada. Y, la verdad, no les iba a ser tan fácil quitarme la ilusión.

Iré al grano. Ayer, día 4 de agosto, me lo pasé haciendo las maletas para irme a pasar mes y medio a Africa. Maletas curiosas cuanto menos para alguien que no ha viajado nunca con nuestra maravillosa ONG ya que su composición es más o menos la siguiente: 70% medicamentos que consigo que donen aquí; un 20% de latas de proteínas (atún, sardinas...) ya que allí escasea bastante; un 5% de globos, chuches y demás cosas canjeables por sonrisas que iluminan el viaje; y un ultimo 5% de ropa. 

Bueno, pues tras una noche nada cómoda en la que no dormí nada en parte por la fiebre que tenía y en parte por los nervios, nos plantamos en el aeropuerto con todo el equipo; las 2 maletas y la mochila. Entonces es cuando yo con toda mi buena fe me dirijo al mostrador para hacer el check-in....pero, ¡aiba! no aparezco como pasajero del avión... la pobre azafata prueba a buscarme de 200 formas pero ninguna funciona. Me lleva entonces al mostrador de atención al cliente de la aerolínea. Tras media hora esperando, un chico me comenta que mi reserva fue cancelada un mes después de que comprara el billete....entro en shock... ¿¡¿Cómo?!? Evidentemente, yo no había hecho cancelación alguna. Me dice que ellos no pueden hacer nada, que tengo que ponerme en contacto con eDreams, donde compré el vuelo.

Con una curiosa mezcla de resignación, agobio y pena me pongo a llamar a todos los teléfonos de eDreams que encuentro. Pero como suele pasar en estos casos, nadie responde. Tras varios correos enviados y unas cuantas llamadas en las que no recibí respuesta... "Mamá, vámonos a casa por favor. No hay nada que hacer.." Con la lagrimilla apunto de asomar por el ángulo del ojillo, cogí las maletas y me fui a casa...el viaje a África este año no empezaba tan bien como esperaba.

Pero yo soy un cabezota de cuidado, y no dejo que nadie me quite la ilusión por algo. Así que con todo mi dolor me puse a buscar vuelos nada más llegar a casa y a intentar reclamar el dinero perdido en el viaje "cancelado". Finalmente, conseguí que el dinero me lo devolvieran. Y esta mañana ya tenía mi vuelo. Salimos una semana más tarde y, por tanto, me volveré una semana más tarde. Porque quitarme tiempo de mi mes favorito del año no se lo voy a permitir a casi nadie, y menos aún a una cacota de compañía de vuelos.



Empieza con susto, pero no acaba tan mal. Hoy una buena amiga me decía: "Estaba claro que no te ibas a quedar sin África Alvaro", a lo que yo le contesté; "No sé si estaba tan claro. Lo que estaba claro es que no me iba a rendir sin intentarlo."

Y es que por las cosas que importan hay que luchar con uñas y dientes.
La aventura no ha hecho más que empezar.

Espérame Benin que en nada estoy allí. 

GO GO GO!!!









Comentarios

  1. You are truly an amazing person. You are going to make it to Africa. I know you will. You are going to make such an incredible impact on so mamy people there. You're truly an inspiration to me and I know so many other people. Stay strong and never give up hope.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

A la segunda va la vencida. ¡Nos vamos!

Perú, here we go!